sábado, 19 de julio de 2014

La Guerra de Java: rebelión de Diponegoro, Indonesia (1825-1830)

Antiguo mapa sobre Java
Durante el S.XVIII hasta 1825, los holandeses dependía de la alianza con la clase aristocrática de Java, lo que les permitió gobernar de una manera indirecta. El papel de los regentes de la expropiación de los cultivos comerciales a los campesinos para entregarlo a la Compañía de Indias Holandesa les ofrecía un sistema cómodo de obtenciones de renta, también la aristocracia local cobraba sus  impuestos para el arroz y el trabajo. No se encontraron variaciones en este patrón a través de Java, con adaptaciones locales. Por otra parte, la élite en el centro de Java fue humillada por una ocupación británica y con la posterior partición de Yogyakarta en 1812. Muchas de las élites se vieron sin  fondos y endeudados con los holandeses. El grueso del pueblo también sufrió debido a la guerra y la ocupación de mano obra por parte de los campesinos chinos empleados por los británicos y los holandeses.

Después de su derrota en las guerras napoleónicas en Europa, el gobierno holandés que estaba en dificultades económicas que intentó cerrar sus deudas mediante la imposición de impuestos sobre las colonias, incluso en las Indias Orientales Holandesas. Además, también se llevaron a cabo monopolios empresariales y comerciales para maximizar las ganancias. Los impuestos y las prácticas monopolísticas fueron asfixiantes para el pueblo de Indonesia. Para fortalecer aún más el poder y la economía, los holandeses comenzaron a tratar de controlar a los demás reinos en el archipiélago, uno de ellos es el reino de Yogyakarta, en el cual, estaban interesados en poseer. Hamengkubuwana V (1822), de 3 años de edad, accedió al trono de Yogyacarta, teniendo un menor de edad era fácil de manejar, los holandeses que por esos momentos estaban interesados en el Reino, vieron su oportunidad para manejar las riendas del reino. Diponegoro viendo esto día tras día estaba harto de la conducta de los holandeses quienes no respetaban las costumbres locales y ahogaban al pueblo con impuestos, esta actitud abiertamente antiholandesa del príncipe hizo que se granjeara el apoyo popular, el apoyo de gente que pensaba como Diponegoro, pensaban que esa situación había de acabar ya. La aristocracia hasta ahora no hicieron mucho para resistir la usurpación de su hegemonía, pero esta dinámica iba a cambiar.

Diponegoro
La guerra de Java de 1825-1830 constituyó la última resistencia de la aristocracia javanesa al dominio holandés. Su figura central fue Pangeran Diponegoro (1785-1855), el hijo mayor del sultán de Yogyakarta Hamengkubuwana III. Su educación  estaba compuesta por elementos tanto islámicos como místicos: él estaba muy familiarizado con las enseñanzas de las escuelas islámicas tradicionales en la aldea rural donde vivió como un niño con su abuela, además de experimentar una visión en la que la diosa del Océano Austral prometió que él era un rey futuro.  Diponegoro era el hombre que podía movilizar tanto a la élite como a la gente común contra los holandeses, como príncipe tenía acceso a la aristocracia, como místico a la comunidad religiosa, y como habitante de zonas rurales a las masas en el campo. Diponegoro tenía un considerable atractivo popular, con base en el Islam y el misticismo javanés, creó un escenario similar al de las guerras del siglo XX en el sudeste de Asia.


General De Kock
La causa inmediata de la revuelta de Diponegoro fue la decisión holandesa para construir una carretera a
través de una propiedad suya que contenía una tumba sagrada. Ante ello estalló la Guerra de Java, una guerra de guerrillas amargo en la que 200.000 javanesa murieron frente a tan sólo 8000 víctimas del bando holandés. Aunque la rebelión fue liderada por Diponegoro y otros aristócratas, esta fue una gran guerra exhaustiva en la que el ejército colonial holandés bajo el mando del general De Kock, luchó en contra del sector de la población indígena anticolonial liderada por Diponegoro. Para los holandeses esto se convertía en el mayor obstáculo que se habían enfrentado durante la colonización del archipiélago.

La rebelión fue suprimida cuando los holandeses adoptaron el "sistema de fortaleza": en la cual se establecían pequeñas fortalezas defendidas por regimientos. Diponegoro, líder de la rebelión fue arrestado en 1830 y exiliado. Los territorios de Yogyakarta y Surakarta se redujeron sustancialmente,a pesar de que los sultanes pagaran indemnizaciones. En definitiva, la guerra no fue un movimiento anticolonial moderno. Diponegoro y sus seguidores, probablemente no querían restaurar un pasado precolonial idealizado. Tampoco imaginaban construir una nación independiente y moderna. Más bien ellos buscaban que Java estuviera libre del poder holandés. La Guerra de Java dio un gran impulso a la tendencia conservadora en la política colonial holandesa,  los holandeses continuaron el viejo sistema de gobierno indirecto. La captura de Diponegoro marcó un antes y un después en la Historia de Indonesia, supuso el fin de una época en la que primaban los estados independientes, los priyayi, o aristócratas administradores, quienes realizaron esta revuelta pasarían a formar parte de la máquina administrativa del colonialismo holandés.
Cuadro que refleja la rendición de Diponegoro

BIBLIOGRAFÍA:
-AA.VV. The Cambridge History of Souteast Asia. Volume two. Cambridge University Press. 2008
-BROWN. Collin. A short History of Indonesia.Allen & Unwin. 2003
-DOUGLAS.A.Philip. Indonesia. Chelsea house publisher. 2005
-RICKLEFS. M.C. A modern History of Indonesia since 1200a.C. Palgrave.2001


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